Qué ganas tenía de primavera… El cambio horario aunque en casa nos afecta durante unos días, me compensa con tal de tener tardes largas.Me da una inyección de vitalidad.
Pero si hablamos de piel es otra historia.Durante años, la llegada de abril automáticamente se reflejaba en mi cara. Justo en las mejillas aparecía un brote de rosácea, granitos o piel más inflamada…¿Te sucede ésto? El acné, rosácea y eccema pueden acentuarse y aparecer en esta época debido al cambio de temperatura, aumento de humedad y mayor exposición solar.
El incremento de la temperatura provoca que aumente nuestra producción de grasa por nuestras glándulas sebáceas,y también el sudor puede irritar nuestra piel.
Además el polen y otros alérgenos que se liberan al aire, provocan la liberación de histamina, que se puede reflejar en la piel a través de brotes rosácea o erupciones.
Cuenta la esteticista holística Britta Plug que nuestros cuerpos reflejan la naturaleza.
La naturaleza duerme durante el invierno y todo se ralentiza, producimos menos aceites en nuestra piel, nuestro pelo crece a menos velocidad…y cuando todo cobra vida en primavera nuestra piel hace lo mismo.Despierta pero con ella pueden aparecer granitos y rojeces que alteran su equilibrio. Así que en primavera hay que calmar y despertar la piel…¿Cómo conseguirlo? Haciendo pequeños cambios en la rutina facial y dieta.
Reparar el manto lipídico que en invierno se ve comprometido es clave para minimizar estos brotes estacionales.
Aquí van una serie de consejos para devolver la calma a tu piel esta primavera.
1.Hidrata pero evitando asfixiar la piel. Queremos mantenerla hidratada y jugosa pero también que respire.
Usa tónicos, esencias de tratamiento o aguas florales y termales después de la limpieza facial y a continuación una hidratante ligera o sérums y aceites “secos” que penetren rápidamente en la piel.
En esta época evita los tratamientos con ácidos fuertes como glicólico, que pueden potenciar la irritación de la piel.
2.Incorpora ingredientes botánicos calmantes y antioxidantes ya que tienen un efecto protector y minimizan el daño solar.
Utilízalos en mascarillas faciales o sérums por la noche. Aceite de rosa mosqueta, acerola(ricos en vitamina C), caléndula, manzanilla.
3.Si tienes la piel especialmente irritada, abusa de mascarillas calmantes e hidratantes.Puedes aplicar nuestro Soothing Cleansing Balm como mascarilla durante 20 minutos. También mascarillas caseras a base de miel.
4.La protección solar es crucial en esta época del año.Si durante el invierno no has sido constante con ella, es el momento de utilizarla a diario antes de salir de casa. Si tienes tendencia a acné o brotes de rosácea opta por las que son libres de aceites y a ser posible con ingredientes hipoalergénicos.
5.Incorpora en la dieta alimentos detox.En la medicina tradicional china todo lo amargo se considera un gran detoxificante. Toma té verde, súper antioxidante.Es un excelente aliado para mantener una piel protegida.
Y sobre todo, relájate.A mi me ayudaba mucho pensar que la piel está en continuo cambio, y que un brote de rosácea o acné es un estado transitorio que pasará para tener más tarde la piel sana y calmada.
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