El tónico puede pasar desapercibido en una rutina de belleza. Esto ocurre generalmente por no tener demasiado claro cuál es su propósito y si realmente merece la pena incorporarlo diariamente. Pues bien, los tónicos son extremadamente importantes y sus beneficios en la piel son varios. Si aún no forma parte de tu rutina, espero que después de leer este artículo te decidas a incorporarlo.
1. Hidratación instantánea.
El tónico ofrece a tu piel una hidratación efectiva. Las células de nuestra piel necesitan agua para sobrevivir, así que los tónicos o esencias son aliados en este punto. Recomiendo aplicarlo del siguiente modo:
Después de limpiar la piel aplica el tónico o esencia realizando presiones directamente con las manos. Con la piel humectada, aplica el siguiente producto de tu rutina, ya sea sérum o crema, de este modo conseguirás una hidratación duradera.
Los tónicos que uses no deben contener alcohol ya que resecan la piel.(Nuestra esencia Brightening Soothing Essece no contiene alcohol)
2. Elimina las sustancias perjudiciales que puede haber en el agua del grifo.
En la limpieza facial usamos el agua del grifo para retirar el limpiador. Este agua lleva sustancias como cal y otros minerales que pueden quedar sobre la superficie de la piel, resultando agresivas para la epidermis. Con el tónico consigues eliminar estas sustancias y preparar la piel para recibir el tratamiento posterior de forma eficaz. ¿Sabías que algunos esteticistas recomiendan usar agua termal en el aclarado del limpiador?
3. Equilibran el pH de la piel.
Si usas limpiadores en espuma el pH de tu piel se altera, la piel queda más seca y tirante. El tónico o esencia es un producto clave para equilibrar el pH. No obstante nunca recomiendo usar limpiadores en espuma. Opta por otras fórmulas como leches, aceites o bálsamos.
4. Contienen activos que penetran profundamente.
Quizás es una de las diferencias más importantes entre un tónico y una esencia. Las esencias son ricas en ingredientes activos antioxidantes, calmantes o reparadores que penetran rápidamente constituyendo un tratamiento en sí mismo.
En función de los ingredientes que contenga, pueden calmar la piel, prevenir brotes de acné, o proteger de los radicales libres.
Además se cree que una piel húmeda es 10 veces más permeable que una piel seca. Por lo que si dejas la piel humectada tras el uso de la esencia, los activos de los ingredientes que apliques a continuación penetrarán mejor en la epidermis.
De este modo estarás mejorando la eficacia de tu rutina facial.
5. Mantiene nuestro manto lipídico saludable.
Al incorporar nutrientes e hidratación, las esencias intervienen en matener equilibrada nuestra barrera de hidratación. Recuerda que mantener un manto lipídico sano es clave para prevenir infecciones como la bacteria responsable del acné y evitar eccemas y deshidratación. El manto lipídico es como un guardaespaldas de nuestra piel, que deja pasar “lo bueno” y mantiene fuera ” lo malo”.
¿Qué te ha parecido? ¿Le darás una segunda oportunidad a este producto en tu rutina?
Gracias por leer.
Un abrazo,
Elena