Tras la vorágine de Septiembre, mes en el que aterrizamos y vamos apagando fuegos, llega el Otoño, una estación en la que asentamos rutinas y tenemos todo más o menos organizado. Y es entonces cuando empezamos a prestar más atención a nuestra piel que quizás has dejado de lado durante unas semanas.
En esta época en la que empezamos a perder el bronceado, percibimos de manera más intensa las líneas de expresión y arruguitas, las manchas que se han intensificado por la exposición solar, y es bastante habitual notar la piel más seca y/o deshidratada.
Me voy a centrar en estos tres aspectos y vamos a ver qué necesita tu piel para tratarlos.
Líneas de expresión y arrugas
Para atenuar líneas de expresión o arrugas y prevenir la formación de las nuevas debemos potenciar la síntesis de colágeno, elastina y ácido hialurónico, además de proteger la piel de los radicales libres con antioxidantes.
Para ello necesitamos incorporar cosméticos ricos en aceites vegetales antioxidantes como el de uva, sésamo, rosa mosqueta, frambuesa, o higo chumbo, extractos como té verde, activos como vitamina C, vitamina A , vitamina E y ácido hialurónico de bajo peso molecular, capaz de penetrar profundamente en la piel.
Como prevención y para evitar que se marquen más las arrugas, te aconsejo que incorpores en tu rutina el masaje facial, con rodillo o gua sha, o simplemente con las manos.
Hiperpigmentación
En función del origen y el alcance de la pigmentación, puede ser más o menos ardua la tarea de atenuar manchas que se han intensificado en verano. El Otoño es la estación perfecta para trabajar sobre ellas.
Seguiremos usando factor de protección FPS 50+ e incorporaremos ingredientes como vitamina C, flavonoides que podemos encontrar en aceites vegetales como el de uva y pepita de frambuesa o granada.
Extractos botánicos como emblica, regaliz o mora.
Ácido azelaico.
Te recomiendo realizar una exfoliación semanal para una mayor eficacia de tus cosméticos.
Deshidratación y/o piel seca
El cambio estacional y cambios de temperatura provoca que nuestra piel se sienta más deshidratada y tirante. En verano solemos usar texturas más ligeras y menos grasas que ahora pueden resultar insuficientes para tu piel Es el momento de empezar a incorporar activos ricos en ácidos grasos, que nutran nuestra piel y pueda estar repulpada y jugosa.
Ingredientes interesantes son la manteca de karité, el aceite de jojoba, ácido hialurónico, ceramidas, vitamina E, aloe vera.
Aplica una mascarilla hidratante a la piel todas las semanas y utiliza limpiadoras faciales en textura leche o bálsamo, evitando los jabones.
Analiza si tu piel necesita tratar alguno de estos aspectos, piensa en tu rutina actual, y observa si alguno de tus productos está indicado específicamente para ello. Y a partir de ahí construye tu rutina de día y noche.
Ten en cuenta que a veces, una buena rutina no consiste en añadir productos y activos,sino en eliminar. Quizás estés usando productos que no te aporta nada, o que está irritando tu piel.
Es la época perfecta para incorporar productos nuevos y desechar aquellos que crees que no le están haciendo bien a tu piel.
Si tienes la piel sensible…un consejo. No incorpores más de un producto nuevo a la vez. Si tienes problemas de alergia a algún activo no podrás identificar rápidamente a cuál es debido, y tendrás que eliminar durante varias semanas todos los productos nuevos.
Si necesitas ayuda para establecer tu rutina no dudes en escribirme y te invito a suscribirte a nuestra newsletter para recibir más contenido como este sobre el cuidado de la piel.
Un abrazo ,
Elena